Que los chinos superan a accidente en casi todo, es algo que se sabía, pero que los chinos han encontrado la solución a ese gran número de ceros que acompañan a cada boda, no se ha sabido hasta hoy.
El sector nupcial, como tantos otros, se ha visto tocado por la crisis financiera mundial. Dar el "Si, quiero" en tiempos como los que corren es algo que retrasa “el día más feliz de nuestras vidas”. Ante semejante percal, China, como siempre pionera, ha propuesto la opción de celebrar banquetes nupciales en tres de sus establecimientos de Hong Kong.
Los hombrecillos serán tachados de “amarillos”, tendrán los ojos rasgados y la media mas baja en el tamaño del pene, pero nadie puede discutirles que son los amos y señores del mundo. No solo cuentan con el lujo de grabar en todas partes “Made in China” que es para quitarse el sombrero, sino que además han encontrado la formula más barata para casarse y no en cualquier lugar, no, en la cadena de restaurantes de comida rápida más famosa del mundo, McDonald’s.
La directora de comunicación corporativa de McDonald's Hong Kong, Helen Cheung Yuen-ling, explicó que en los últimos dos años han recibido alrededor de diez peticiones al mes de personas que querían celebrar su enlace en los restaurantes de la cadena. "La gente cuenta que se conocieron aquí, o que quedaban aquí, y por ello quieren casarse aquí. Vemos esto como una oportunidad de negocio", así rezan las declaraciones ofrecidas por la señorita CheungYuen-ling.
Si el asunto económico sigue así, habrá que empezar a olvidarse del solomillo al queso tradicional para sustituirlo por esa riquísima carne que, dicen, es 100% vacuno. Mientras que, la típica foto de los novios que cortan la tarta nupcial pasará, sin duda, a la de una pareja de recién casados sonrientes con dos cucharillas de plástico metidas dentro de un McFlurry de colorines.
Mis queridos lectores, esto simplemente es “Made in China”.
