Al baño María

La COPE y la Conferencia Episcopal son desde hace mucho tiempo atrás, factores de desestabilización y de conflicto.

Su principal comunicador invoca su libertad de expresión para, acusar al presidente del gobierno de traidor, de hombre empeñado en romper España, además con un plan preconcebido, junto a separatistas e inmigrantes. Traicionar a las victimas del terrorismo y como siempre hizo la izquierda criminal (repiten mucho eso de criminal) destruir una Nación que odian. Y que el rey debería haber abdicado por que permite esta barbarie, cosas así dicen. Con un lenguaje ofensivo de grueso y desmesurado calibre entre el grado de guasa y gracioso de casino que se burla de todo y de todos.

Este comunicador, gasta ese modelo de complejo de superioridad que, solo se adquiere cuando se lleva toda la vida huyendo de algún complejo del sentido contrario. Cuando él arremete, se burla y desdeña, es por que es libre y por que está utilizando su libertad de expresión, pero, quienes le critican no tienen libertad de expresión entonces son liberticidas y quieren acallarle.

Pero no es así, por que nadie pide que se le silencie, es más, le pasamos por alto. Pero con la misma libertad de expresión que él emplea le pido que se observe la gigantesca hipocresía de la Conferencia Episcopal, que predica paz, caridad y concordia y está vendiendo veneno y discordia y se está lucrando con ello.

Y lo hago además con conciencia histórica por que muchos españoles también hemos leído libros, como este comunicador, incluso muchos libros, y además de haber aprendido en los libros a no alardear, hemos aprendido a temer la alianza del pensamiento político ultramontano con el pensamiento religioso trivial.

Recuerden estos precedentes quienes se llaman centristas y se están subiendo a ese carro para vender o para ganar elecciones.