Al baño María

Desconozco si lo que pienso es fruto de la fiebre que tengo. Lo unico que se es que como diría Audry Hepburn hoy tengo el día rojo, no se debe precisamente a la menstruación, para todos aquellos que no vean mas allá de sus narices va la explicación.

Los días rojos son aquellos en los cuales te levantas con miedo, yo me he levantado directamente ofuscada, tras haber dormido ayer entre una cosa y otra 16 horas, hoy he despertado queriendo no despertar. Mi cabeza barruntaba algo, y cuando yo barrunto, modestia aparte, es que barrunto correctamente.

Llevo desde las 17:00 sin fumar un cigarro, lo cual me hace estar con las uñas sacadas. Mas aún si, sin mediar palabra, recibo una bofetada, no literal por favor no tomen lo que digo al pie de la letra. Las bofetadas morales habitualmente duelen mas que las físicas, a mi me duelen hasta el punto de que arrastro mi vida con ellas.

Estoy francamente cansada de fingir buena cara, de sonreír a todo el mundo, en definitiva, de poner la otra mejilla.
si he de ser mala lo será. Si he de morder cuando van a aprovecharse de mi otra mejilla morderé. Si he de volver a aguardar el momento preciso para hacerme respetar aguardaré. Frívola, calculadora, retorcida y sin escrúpulos. si así lo reclaman así lo recibirán.

Poco importa todo lo que supuestamente haces por mi, poco importa lo que de vez en cuando muestras para después darmela en mitad de la cara. Poco me importa. No eres bueno ni lo serás nunca. Lo único que te importa en la vida eres tu mismo, antes y después tu y yo lo siento en el alma pero no estoy dispuesta a volver a lidiar con esa situación. Punto pelota.


En definitiva, se acabó la buena chica.